Las catas arqueológicas en la Capilla Real de la Catedral de Sevilla, han descubierto un muro de ladrillo en muy buen estado de conservación, dos enterramientos cristianos datados en el siglo XIV y una cabecera del templo previa al ábside gótico que correspondería a la primera mitad del siglo XV.
El muro de ladrillo habría pertenecido a la antigua mezquita de la Isbilya del siglo XII.
Deja una respuesta